En 1935 los primeros hombres blancos, españoles, al mando de Hernán Cortés, se dirigieron al Valle de México, y con gran asombro admiraron la imponente capital azteca que se levantaba por encima de las aguas del lago de Texcoco.
La fecha, 8 de noviembre de 1519, de acuerdo a la información de uno de los tenientes de Cortés: Bernal Díaz del Castillo, quién cuarenta años después escribiera sus memorias sobre la primera impresión a su llegada al Valle de México:
"- Durante la mañana, arrivamos a uno de los bordes del valle, y continuamos muestra marcha hacia Iztapalapa, y al observar tantas construcciones que emergían de entre las aguas y otros grandes templos levantados en tierra firme, y aquella calzada que corría hasta el gran centro de México quedamos asombrados y sentíamos una especie de embrujo al ver la majestuosidad de aquellas torres y pirámides de piedra. Y algunos de nuestros soldados preguntaron si lo que estaban viendo era verdad ó parte de un sueño ...-"
